No tan perdidas

Para Star Wars la era Disney comenzó con El Despertar de la Fuerza y, junto con esa película, una gran cantidad de novelas inundaron el mercado para formar lo que hoy se conoce como el Nuevo Canon. Una de las escritoras que viene pisando fuerte y más adeptos ha logrado es Claudia Gray quien, con su novela Estrellas Perdidas, se introduce de forma sólida en esta Galaxia muy muy lejana. Si bien la historia no brilla por su originalidad, dado que se trata de una nueva versión de dos amantes que pertenecen a condiciones sociales muy diferentes; tipo de narración que se inicia en la mitología greco romana con Piramo y Tisbe y ha sido reescrita prácticamente en todas las épocas y géneros; está muy bien lograda, atrapa desde el comienzo y no dan ganas de abandonarla hasta llegar al final. La ambientación ocurre durante la época de la resistencia pre y post batalla de Yavin. Sus protagonistas Thane Kyrell y Ciena Ree, nativos del planeta Jelucan, se verán enfrentados primero por pertenecer a dos clases sociales distintas y más tarde a facciones políticas opuestas enfrentadas en la lucha por la liberación y el dominio de la Galaxia; pero a pesar de todo, ambos intentarán construir un camino juntos. La novela consigue una ambientación correcta dentro de lo que se conoce como Universo Star Wars, rescata el espíritu conseguido a través de las viejas historias del Universo Expandido y su trama se inserta de forma notable dentro de los eventos narrados por la Trilogía Original. Por todo lo expuesto Estrellas Perdidas es una novela para no dejar pasar.